El vizcaíno Félix G. Modroño es el autor de ‘La ciudad de los ojos grises’, una novela publicada por Algaida y que suma ya cuatro ediciones desde su lanzamiento el pasado año. Para conocer más sobre esta novela y su trayectoria como escritos hemos hablado con él.
¿Cómo comienza ‘La ciudad de los ojos grises’?
La novela es un homenaje a la ciudad de Bilbao. Por eso quise situarla en el momento, a mi juicio, más trascendental de su historia, cuando dejó de ser una pequeña villa para convertirse en la gran ciudad que conocemos. Pretendí al construirla que fuera una novela que perdurara en el tiempo, que animara a visitar la ciudad a quienes no la conozcan y que se convirtiera en un libro de cabecera para todos los bilbaínos
Tiene una trama criminal, pero a la novela se van sumando otros muchos factores…
Es que, al final, la trama criminal y posiblemente también la sentimental son una escusa, los hilos conductores que usé para hablar de la brutal transformación de Bilbao: sus cambios sociales, arquitectónicos, culturales, demográficos… En definitiva, lo que determinó la idiosincrasia de la ciudad.
¿Por qué decides ambientar la novela en la I Guerra Mundial?
Hasta ahora eran las historias las que me llevaban a la época. Por eso, el doctor Zúñiga se mueve en el siglo XVII. Sin embargo, en ‘La ciudad de los ojos grises’ la época tenía que ser esa. El hecho de que estallara la I Guerra Mundial fue circunstancial para mi novela, pero no me quedó más remedio que integrarla en la historia. Y al final, tuvo más relevancia de lo que inicialmente pensé. Los espías siempre dan juego.
¿Cómo te documentas para dotar a la obra de veracidad histórica?
Mi proceso de documentación roza la obsesión. Durante más de un año leo libros y examino fotos buscando detalles que puedan enriquecer la novela sin que resulten tediosos. Trato de convertirlos en anécdotas. Solo cuando estoy seguro de dominar los escenarios, me imbuyo en la escritura de la novela.
En la novela aparecen personajes históricos aunque con nombre ficticios ¿Por qué querías que el lector descubra por sí mismo su identidad?
Creo que todos los personajes históricos tienen su nombre real. Otra cosa es que no les haya apellidado intencionadamente o no les haya bautizado desde el principio. En ese sentido, sí que era una especie de juego con el lector.
Más de 10.000 ejemplares vendidos hasta la fecha ¿esperabas un éxito mayor al de tus anteriores novelas?
Cuando un autor escribe, siempre tiene la esperanza de ser leído por el mayor número posible de personas. El tono de esta novela puede que sea más universal y que el mestizaje de géneros consiga llegar a más público. En cualquier caso, me siento muy orgulloso de mis lectores. Y lo que espero es que gracias a ‘La ciudad de los ojos grises’, el doctor Zúñiga –el investigador del siglo XVII, protagonista de mis dos primeras novelas- sea más conocido. Creo que el personaje lo merece.
¿Tienes en mente ya una nueva trama con la que crear un nuevo trabajo?
Estoy trabajando en una novela que se desarrollará en dos épocas distintas. Una, por primera vez en mi obra, será la actual. También beberá de varios géneros y, por supuesto, con una trama criminal de fondo. Pero lo que pretendo es cuestionar una serie de valores que por venirnos impuestos o por mera costumbre ni siquiera nos atrevemos a discutirlos.
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